ECO
Somos tu voz
Una charla con la profe Adriana Bravo
Hemos tenido la oportunidad de entrevistar a nuestra querida profesora de Química y pudimos conocer un poquito más sobre su vida y sus próximos planes y objetivos.

-Nos ha llegado la información de que está por jubilarse, ¿es cierto?
-Sí, creo que me voy a jubilar, cumpliría la edad en noviembre de este año y los años de servicio supuestamente los tengo, tengo que ver si están todos.
-¿Entonces comenzaría su jubilación este año o el año que viene?
-Y, cumplo 57 años el 30 de noviembre y depende cuando salga la jubilación empiezo el año que viene o ya directamente no; la verdad que no lo sé.
-¿Cómo cree que se sentirá cuando deje de hacer esto que tanto ama?
-Muy triste, pero más que todo por el contacto con ustedes, con los alumnos, eso lo voy a extrañar mucho y no sé que voy a hacer cuando no los tenga para retarlos y para pegarles (se ríe) y hacerles todo lo que les hago. Los voy a extrañar en serio, al aula la voy a extrañar seguro, a los preceptores... hasta por ahí nomás (entre risas).
-¿Qué le gustaría hacer cuando se jubile?
-Voy a aprovechar mi tiempo libre haciendo cosas que siempre me gustaron hacer y nunca tuve tiempo, por ejemplo leer, ir al cine más seguido, caminar, viajar si puedo, y hacer alguna que otra actividad relacionada a la educación.
-¿El recuerdo más feliz que ha tenido en estos años de docencia?
-Todos son recuerdos felices porque siempre soy feliz dentro del aula compartiendo con los chicos todo, los malos momentos, los buenos momentos.
-¿Qué consejos les darías a los nuevos profesores que van a entrar?
-Que les guste mucho lo que hacen. Primero que nada les tiene que gustar la docencia porque si no, están en el horno. Y que se involucren y que traten de educarlos no solamente en la materia que dan sino también como personas, también valores, que le inculquen la responsabilidad, eso para mí es muy importante.
-¿Qué le inspiró a ser profe y cuánto tiempo lleva en el colegio?
-En el cole debo llevar... entré en 2004 así que 13 años, y en la docencia hace treinta y pico. Yo empecé trabajando como preceptora a los 20 años, y me di cuenta que me gustaba el contacto con los adolescentes y dar clases y enseñar.
-Por último, ¿algún consejo o saludo de despedida que les diría a los alumnos?
-Que los quiero mucho y los voy a extrañar un montón, que nunca me voy a olvidar de ninguno; los nombres me los voy a olvidar pero cuando los vea en la calle me encantaría que me saluden. No me quiero emocionar... (con lágrimas en los ojos) Y que bueno, que sean buenas personas, que se acuerden siempre lo que aprendieron en el cole de todos los profes, lo bueno, lo malo, lo lindo, lo feo, porque todo te ayuda en la vida.
-Muchas gracias por su tiempo.
No es nada, los quiero.
Le agradecemos muchísimo el tiempo que nos brindó, y su forma tan linda y especial de enseñarnos la materia a lo largo de 2do y 3er año. Estamos más que contentos de haberla conocido, y esperamos que vuelva a visitarnos cuando le toque la jubilación… ¡un cálido abrazo querida profesora! La queremos un montón.
Mateo Barranco, Nicolás Rojo y Tomás Velázquez